Decreto Supremo 004-2013-PCM

Cuando hablamos de gestión pública moderna estamos haciendo referencia a una gestión orientada a resultados al servicio del ciudadano.

En este tipo de gestión, los funcionarios públicos calificados y motivados se preocupan por entender las necesidades de los ciudadanos por entender las necesidades de dichos ciudadanos.

Esto está regulado en el marco de las políticas públicas de Estado, tanto nacionales como regionales y locales en base a las competencias que incumben a cada nivel de gobierno.

Por otro lado, organizan tanto procesos de producción o actividades, entendidas como el conjunto de acciones que transforman los insumos en productos en la llamada cadena de valor, como procesos de soporte.

El objetivo es el de transformar dichos insumos en productos cuyo resultado sea el aumento de la satisfacción de los ciudadanos, garantizando los derechos de los mismos al menos costo posible.

Para conocer el alcance y los objetivos del Decreto Supremo 004-2013-PCM puedes ver el siguiente artículo.

 

Gestión pública orientada a resultados efectiva

Una gestión pública orientada a resultados efectiva se logrará cuando las entidades estén en capacidad de:

• Establecer objetivos claros y articulados. Tanto a nivel sectorial así como territorial, es decir, nacional, regional y local. Dicho objetivos deben de ser expresados en metas de producción, es decir, cantidades de servicios de una determinada calidad. Estos deben de ofrecer como resultado un mayor nivel de satisfacción a la sociedad.
• Reasignar los recursos presupuestales para incrementar los niveles de producto y resultados esperados. Es decir, formular el presupuesto en función de los objetivos establecidos en los planes.
• Desarrollar y optimizar los procesos de producción o trabajo y los procesos de soporte. El objetivo es conseguir los niveles de producción de bienes y servicios públicos de calidad previamente fijados por la sociedad. Estos deben alcanzarse con la mayor eficacia y eficiencia posible en base al uso adecuado de los recursos.
• Reordenar o reorganizar las competencias y funciones contenidas en la estructura funcional actual. La reorganización debe llevarse a cabo tanto a nivel nacional como a nivel regional y local. Deben de adecuarse a una organización que esté basada en procesos de la cadena de valor.
• Establecer un sistema de indicadores de desempeño y resultados. Este nuevo sistema debe posibilitar el monitoreo y la evaluación de los insumos para verificar si los insumos se están transformando en aquellos productos esperados por los ciudadanos. Además de comprobar si se están llevando a cabo aplicaciones de procesos más eficaces y eficientes. La información encargada de la monitorización y el desempeño debe capitalizarse en un Sistema de Gestión de Conocimiento. Dicho sistema debe permitir establecer procesos de Cambio Cultural o de Mejora Continua de la Calidad. Esto debe ir sobre la base de las mejores prácticas internacionales, como puede ser el benchmark, y nacionales. Y deben ir a través de la sistematización y el almacenamiento de la información referente a:
  • Los distintos estándares laborales que mejor funcionamiento tuvieron o los procesos más eficaces y eficientes.
  • Los formatos más amigables.
  • Los términos de referencia o el alcance de los proyectos.
  • Los contratos más seguros.
  • Las consultoras con las que previamente se ha trabajado.

 

 

Gestión pública moderna orientada a resultados

Del mismo modo, para lograr una gestión pública moderna orientada a resultados, las entidades deben:

• Desarrollar canales para conseguir una mayor transparencia, accesibilidad y participación del conjunto de la sociedad y rendición de cuentas por el Estado.
• Desarrollar y emplear intensivamente tecnologías de información y comunicación (TIC) que acerquen los servicios del Estado a los ciudadanos y a las organizaciones.
• Optimizar los procesos de cada uno de los organismos que conforman la Administración Pública.
• Coordinar y cooperar entre sí, con el objetivo de articular y complementar objetivos, acciones, recursos y capacidades institucionales en función de maximizar el rendimiento de dichos recursos y capacidades y mediante estos, el desempeño y los servicios del Estado a favor de los ciudadanos.
• Fomentar un cambio cultural en las instituciones públicas que permita sostener el esfuerzo de modernización, el cual deberá partir por entender la necesidad de cambiar la gestión pública hacia una gestión por resultados. En ese sentido, la gestión del cambio constituye el motor que hará posible sostener este salto de una gestión centrada en sí misma a una que enfoque su accionar en el ciudadano.

Ahora bien, el modelo de gestión orientada a resultados es un proceso sustentado en cinco componentes, los cuales posteriormente, servirán de pilares para la propuesta central de la política de modernización de la gestión pública.

 

Software Gestión de Procesos

Con el Software ISOTools Excellence se puede automatizar la Gestión por Procesos, también conocida como Business Process Management (BPM), centralizando todo en una sola herramienta. Asimismo, permite integrar varios sistemas de gestión basados en este enfoque de procesos.